Os voy a contar un cuento sobre como la meditación puede ayudarte a cambiar tu vida, sin ni tan siquiera tener que esforzarte. Sólo practicándola, dejándote llevar, soltando los lastres y permitiendo que cuando sea el momento, tu subconsciente salga a la luz, y forme parte de tu consciente.
” Soy Ana una chica normal y corriente como tú, pero decidida a cambiar mi vida, decidida a hacer de mi mundo interior un mundo en el que pueda romper mis barreras limitadoras, y crear en mi exterior una vida llena de paz y aceptación de mi día a día. Por eso quiero contaros lo que hoy me ha pasado. Quizás te preguntes ¿y para qué me sirve tu experiencia?. Seguramente no te servirá para nada, o quizás sí, pero al menos lo habrás leído y habrá quedado en tu subconsciente, y él ya sabrá que hacer.
Hoy, meditando como cada mañana, me he puesto a correr con mi lobo interior como hago en mi meditación, y de repente he cogido una gran velocidad, he corrido tan rápido que he adelantado por primera vez a mi compañero de meditación, a mi “lobo interior”.
Entonces raramente, él me ha empezado a hablar. Me ha sorprendido, porque hasta ahora siempre nos habíamos dedicado simplemente a correr hasta llegar a la cima de la montaña, y desde allí divisar toda la ciudad juntos. Pero por lo que veo hoy ha sido diferente. Después del impacto de que me hablara, me he calmado y me he permitido escucharlo (al fin y al cabo estaba en mi proceso meditativo, y ya sé que aquí puede pasar lo inimaginable).
Sus palabras han sido pausadas y calmadas, y me ha dicho: .- Por fín me has ganado, por fín has conseguido correr más que yo, “el alumno se ha convertido en maestro”.
Yo toda extrañada le he preguntado: .- ¿Cómo es que puedo escucharte? .- ¿Cómo es que nunca me habías hablado hasta el día de hoy?
Entonces tras unos momentos de silencio, él me ha respondido con toda su calma: .- Hoy me estás escuchando porque has traspasado la barrera de correr de la misma forma que corres cada día, hoy has conseguido dejarte llevar y has hecho algo tan impulsivamente, que ni tu misma te has dado cuenta.
No entiendo nada, yo simplemente he hecho mi meditación como cada día, y en el momento de querer visualizar mi libertad he recreado la misma escena de correr junto a mi lobo interior a mi lado. ¿Qué me estaba diciendo de que había hecho algo diferente? ¿Qué me estaba pasando hoy con mi meditación? Estaba confusa, pero contenta de mantener esa conversación. Entonces le he comentado: .- No entiendo nada, yo he corrido junto a tí como cada día, no se que he hecho diferente para que pueda escucharte y podamos estar manteniendo esta charla.
El lobo sabiamente me ha contestado: .- Abre tu mente y observa bien tu meditación de hoy desde el principio hasta el final, y hallarás la respuesta.
Entonces he recreado toda la meditación (lo que recordaba), y de repente me he visto realmente corriendo de forma diferente, los obstáculos que me encuentro cada día (árboles, piedras, ríos, ramas secas caídas), los he traspasado, no he saltado a través de ellos como hago diariamente. “He traspasado las piedras, he traspasado la materia, y no he sido consciente hasta que mi lobo me ha hablado”, ya se que estaba meditando, pero mi mente nunca había ido más allá hasta el día de hoy. Pero lo más increíble es que lo que he hecho, no ha sido desde mi mente consciente, sino lo habría recordado, lo he hecho desde una parte más profunda, desde mi mente subconsciente.
Tras darme cuenta de lo ocurrido, no he necesitado preguntarle nada, es como si él supiera que ya lo había entendido y me ha dicho: .- Has aprendido la primera lección que yo había venido a enseñarte: ” para dominar la materia has de hacer las cosas de forma diferente, si sigues haciendo siempre lo mismo, sólo obtendrás resultados iguales”, debes ir más allá, dejar de controlar, sumergirte en la meditación te ayuda a liberar tu parte controladora, tu parte consciente, y cuando consigues liberar esta parte, entonces es cuando puedes empezar a crear desde un punto que desconoces, desde un punto que no sabes como lo haces, pero lo haces. Ahora es importante que aprendas a dominar la ciencia de la meditación, para conseguir cambiar desde tu interior todo el exterior que no te gusta. “Esta es la clave del cambio”.
Soy Ana, una chica corriente como tú, a la que a veces le pasan cosas diferentes como me ha pasado hoy. Esta es mi experiencia, este es mi cuento sobre “El lobo interior, mi maestro”
Cuento redactado por Montserrat Oliveros
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